Qué devuelve el análisis
- Métricas HTTP. Latencia, número de redirecciones, URL final y tipo MIME permiten detectar alojamientos frágiles o falta de endurecimiento HTTPS.
- Metadatos SVG. Título, viewBox, atributos de ancho/alto y etiquetas adicionales documentan el recurso y confirman el perfil Tiny-PS.
- Diagnósticos. Los errores impiden que el logo se renderice. Las advertencias señalan construcciones arriesgadas (referencias externas, scripts, archivos pesados) que los proveedores pueden rechazar.
Flujo de trabajo recomendado
- Copia la URL
l=del registro TXT BIMI y ejecuta la comprobación. - Exporta la respuesta JSON para conservar una traza junto con la solicitud de cambio.
- Corrige primero los errores bloqueantes (endpoint HTTPS inválido, requisitos Tiny-PS incumplidos, fallos de parsing).
- Después aborda las advertencias: simplifica las redirecciones, reduce el peso del SVG y documenta la ubicación final en el CDN.
- Repite la comprobación hasta conseguir un estado limpio y solo entonces publica o actualiza tu registro BIMI.
Buenas prácticas al alojar logotipos BIMI
- Sirve el SVG por HTTPS desde un CDN u origen predecible y limita las redirecciones.
- Mantén el archivo por debajo de 32 kB, elimina metadatos innecesarios y cuida que la viewBox refleje el encuadre real.
- Evita scripts, fuentes, foreignObject y referencias externas: infringen Tiny-PS y los webmails los bloquean.
- Vigila la latencia con el tiempo; subidas repentinas suelen indicar incidentes en el CDN o cadenas TLS caducadas que impedirán la carga del logo.